Polémico megadesarrollo industrial afecta manglares
Área de manglar removido para instalar la planta de amoníaco junto a Pemex y CFE. (Foto: Google Earth).
OHUIRA
En el municipio de Ahome, la construcción de una gran planta de amoníaco dentro del sistema lagunar y de humedales de Santa María-Topolobampo-Ohuira, perteneciente a la lista de sitios Ramsar, se encuentra suspendido debido a irregularidades en los permisos y a la inconformidad social.
De acuerdo con la Manifestación de Impacto Ambiental resumida en la Gaceta Ecològica de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la empresa Gas y Petroquímica de Occidente quiere poner una planta de amoníaco anhidro con una capacidad de 2 mil 200 toneladas diarias, además de la instalación de dos ductos que conducirían gas natural, el primero y otro el amoníaco, ambos de 18 pulgadas de diámetro en una superficie de 39.7937 hectáreas.
El líder del proyecto es Francisco Labastida Ochoa, de larga trayectoria política: excandidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), a la presidencia de la República en el año 2000, exsecretario de Gobernación, exgobernador de Sinaloa, expresidente de la Comisión de Energía en el Senado, y actual director de la firma Consultores en Desarrollo, Economía y Finanzas.
La influencia política de Labastida Ochoa se deja sentir en todos los ámbitos del quehacer público. Recibió el aval del actual secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell; el respaldo de su amigo Mario López Valdez, gobernador de la entidad, el apoyo del empresario José Eduvigildo Carranza; del político y empresario, Rubén Félix Hays; y de su propio hijo, Francisco Labastida Gómez de la Torre, actual secretario de Desarrollo Económico y Proyectos Estratégicos del Gobierno de Sinaloa, según el reportaje publicado por el diario Noroeste en días pasados.
En un primer momento, el proyecto no fue aprobado por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), dependiente de Semarnat, cuyo titular, entonces Juan José Guerra Abud, después autorizó de manera pronta los planes de inversión luego de una entrevista con los empresarios y políticos.
El ingrediente internacional lo representa la firma Grupo Proman, invitada por el propio Labastida Ochoa a formar parte del conglomerado industrial y que se anuncia en su sitio web como líder en la ingeniería y construcción que opera en todo el mundo en el procesamiento de gas, petroquímica, acero, la infraestructura y los sectores de la automotriz.
El grupo se declara competente en sectores clave como en la ingeniería, estudios de viabilidad, construcción, ejecución de proyectos, compras, marketing y servicios de gestión. Es el mayor productor de metanol en el mundo, con presencia en cuatro continentes y en más de 12 países. Tiene 31 subsidiarias operativas y unos 1 mil 500 empleados en todo el mundo.
El proyecto en México es construir una fábrica de fertilizantes con una capacidad de producciòn de 2 mil 200 toneladas al día que convertiría al país en exportador de este producto a América Latina, Asia y Europa, principalmente.
Esta empresa afirma que tiene un "compromiso inflexible para proporcionar un lugar de trabajo seguro, saludable y gratificante y proteger el medio ambiente, los recursos naturales y las comunidades." Afirma que sus plantas utilizan la última tecnología probada disponible que minimiza aún más el impacto medioambiental. Además, toma en consideración las leyes ambientales locales y las plantas están diseñadas para cumplir con el más estricto de los códigos internacionales o leyes y regulaciones ambientales locales.
A este poder político y económico se enfrentan los pescadores locales, pobladores y defensores ambientales, quienes esperan que los permisos para autorizar la destrucción de este páramo natural, sean retirados para erigir una de las más grandes plantas productoras de fertilizantes en América Latina, cuyos inversionistas pretenden aprovechar el suministro de gas natural y la cercanía del puerto de altura en Topolobampo, lo que significa energía barata y pronta salida al mercado externo.
Los opositores señalan la corrupción y tráfico de influencias, total ausencia de ética y responsabilidad social, así como el nulo respeto a tratados, convenciones y acuerdos internacionales signados por México, los cuales permiten esta millonaria inversión en el noveno humedal de importancia en México, protegida por la convención de humedales Ramsar.
Hay hasta el momento al menos dos denuncias en contra de la construcción de la fábrica de fertilizantes, la presentada por Gerardo Peña Avilés, exdiputado federal en representación de tres mil pescadores agrupado es 13 cooperativas. El quejoso presentó una formal denuncia ambiental “por la realización de hechos, actos y omisiones que han generado daños graves a los ecosistemas, a éstos como hábitat de flora y fauna silvestre protegida, así como daños directos a vegetación de humedal protegida y a ésta como un ecosistema forestal en sí”.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en la ciudad de México recibió la denuncia el 27 de agosto de 2015, acompañada de un dictamen técnico que detalla las violaciones a los diversos ordenamientos jurídicos. Se solicita que una vez que sean verificados por esa dependencia, sean impuestas varias medidas de seguridad.
La petición fue atendida parcialmente con la suspensión del relleno, y sólo se realizan pequeñas obras, según Peña Avilés. Otra de las demandas consiste en la “neutralización o cualquier acción análoga que impida que materiales o residuos peligrosos generen los efectos de un desequilibrio ecológico, o de daño o deterioro grave a los recursos naturales”.
Entre otras, exige la clausura temporal, parcial o total de las instalaciones, maquinaria o equipos, así como fuentes contaminantes en donde se desarrollen los actos que puedan dañar la biodiversidad o los recursos naturales.
Otra de las demandas consiste en la “neutralización o cualquier acción análoga que impida que materiales o residuos peligrosos generen los efectos de un desequilibrio ecológico, o de daño o deterioro grave a los recursos naturales”.
La instalación de la planta de amoníaco está a un lado de otras plantas, un almacén de Petróleos Mexicanos (Pemex) y una termoeléctrica de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), lo que para la ambientalista y académica Sandra Guido representa un peligro para la seguridad del entorno.
“Más allá del daño ambiental potencial a un humedal con categoría internacional (Ramsar), se deben evaluar los riesgos a la población en caso de un accidente tanto de la planta como una conflagración conjunta PLANTA DE AMONIACO+CFE+PEMEX”, escribió Guido en su cuenta en Facebook.
El Comité Único de la Vivienda de Topolobampo expresó también su disgusto con el proyecto industrial llamando a la población del campo pesquero a una movilización masiva de repudio en contra de la nueva inversión. Gorgonio Silva Gualizapa acusó que al Gobierno y a los empresarios no les importa el grave riesgo ecológico y la salud de la población de la sindicatura de Ahome, y por ello pidió detener el genocidio del estero el Mapahui, según Río Doce, publicación con sede en Culiacán.
La “Convención relativa a los Humedales de Importancia Internacional especialmente como Hábitat de Aves Acuáticas”, conocida como Ramsar, fue acordada en la ciudad iraní de ese nombre en 1971 con el objetivo de procurar “la conservación y el uso racional de los humedales mediante acciones locales y nacionales y gracias a la cooperación internacional, como contribución al logro de un desarrollo sostenible en todo el mundo".
Ramsar cuenta con 169 socios, México se adhirió en 1986 y tiene registrados 142 sitios designados como Humedales de Importancia Internacional (sitios Ramsar), con una superficie de 8 millones 643 mil 579 hectáreas.
Las Lagunas de Santa María-Topolobampo-Ohuira, donde quieren instalar la industrializadora, tienen una gran importancia ambiental: el conjunto es considerado un sitio Patrimonio de la Humanidad, Reserva de la Biosfera de la UNESCO y Área de Protección de Flora y Fauna de las Islas del Golfo de California. Es un sistema de tres lagunas costeras, con un total de ocho islas: seis en la Bahía de Ohuira, según la ficha técnica de Ramsar sobre el sitio.
Tiene todos los tipos de manglar que existen en el país, es el hogar de 84% de las aves acuáticas migratorias distribuido en México durante el invierno. Está sujeto a las inundaciones y las tormentas causadas por los ciclones tropicales que se producen regularmente en la zona y funciona como un estabilizador del litoral mediante la reducción de la energía de las corrientes causadas por la lluvia.
Bobo patas azules, sujeta a protecciòn especial. (Foto: Francoise Folliard, Internet).
Los factores potenciales que podrían causar degradación en la calidad del agua y el paisaje son las grandes cantidades de descargas de aguas residuales, especialmente las agrícolas, a las zonas costeras. La pesca es el uso más importante de la zona. Pero ahora su peor amenaza es la planta productora de amoníaco, de por sí considerado una sustancia peligrosa para la salud humana y los ecosistemas.
Ramsar encontró que en el complejo insular anida la garza rojiza (Egretta rufescens), la cual es un ave sujeta a protección especial por la Norma Oficial Mexicana (NOM-ECOL-059-2001), es zona de alimentación y crianza para tortugas marinas en estadios de vida que van desde juveniles, inmaduros o subadultos y adultos de tortuga golfina (Lepidochelys olivacea), prieta (Chelonia agassizii), laúd (Dermochelys coriacea) y carey (Eretmochelys imbricata), sujetas también a protección especial y presentes en la lista roja de la UICN como en peligro de extinción y las últimas dos consideradas en peligro crítico.
Los cuatro tipos de manglares guardan un estado de protección especial por su función durante la fase reproductiva de numerosas especies de importancia comercial como el camarón, el ostión y diversas especies de peces; así como una serie de cactáceas como el tasajo (Peniocereus marianus) y la viznaguita (Echinocereus sciurus var floresii), endémica de la región de Topolobampo, la cual solo es reportada para la isla Mazocahui, entre muchas otras.
El sitio Lagunas de Santa María-Topolobampo-Ohuira es el noveno de los 28 humedales prioritarios, identificados por Ducks Unlimited de México (DUMAC), que albergan al 84% de las aves acuáticas migratorias distribuidas en el territorio durante el período invernal. En estos humedales habitan temporalmente: 65% de las Cercetas de Alas Verdes (Anas crecca); 69% de los Patos Golondrinos (Anas acuta); 84% de las Cercetas de Alas Azules (Anas discors); 68% de los Patos Cucharones (Anas clypeata); 76% de los Patos Pintos (Anas strepera); 77% de los Patos Calvos (Anas americana); 92% de los Patos Pijijes de Ala Blanca y Ala Negra (Dendrocygna autumnalis y D. bicolor); 91% de los Patos Cabeza Roja (Aythya americana); y 63% de los Patos Boludos (Aythya affinis).
En la Isla de Patos se han contabilizado más de 20 mil individuos de pelícanos de diversas especies, en tanto que en la zona la población de Cercetas de Alas Verdes (Anas crecca) oscila en casi 3 millones de ejemplares y la de Pato Cucharon (Anas clypeata) en 4 millones 641 mil individuos,
Algunas de las especies de aves que viven en la zona lagunar y su estatus de protección en que se encuentran, de acuerdo a la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010, Protección ambiental-Especies nativas de México de flora y fauna silvestres, de acuerdo con el dictamen técnico presentado por Peña Avilés son las siguientes:
- Pelicano Pardo (Pelecanus occidentalis)—Amenazada.
- Garzón cenizo (Ardea herodias)—Endémica Protegida.
- Bobo patas azules (Sula nebouxii)—Sujeta a Protección Especial.
- Gaviota ploma/oscura (Larus heermanni)—Sujeta a Protección Especial.
- Ostrero blanquinegro (Haematopus palliatus)—*Peligro de Extinción*
- Delfín nariz de botella (Tursiops truncatus)—Sujeta a Protección Especial.
- Iguana espinosa de sonora (Ctenosaura pectinata)—Sujeta a Protección Especial.
- Mangle negro (Avicennia germinans)—Amenazada.
- Mangle rojo (Rhizophora mangle)—Amenazada.
Garceta rojiza. (Foto: Internet).
El documento que sustenta la demanda contraviene cada uno de los puntos avalados por la Semarnat para aprobar apresuradamente el proyecto, los más sobresalientes son:
“…no se realizará remoción, relleno, trasplante, poda, o cualquier obra o actividad que afecte la integralidad del flujo hidrológico del manglar…”
“…considera que la realización del proyecto no tendría una interacción directa con la Isla de los Patos ni con las especies presentes en la misma…”.
“El proyecto cumple esta especificación dado que no se realizarán obras sobre el manglar y tampoco afectará los flujos hacia los cuerpos de manglar cercanos, como el que se encuentra en la parte norte del predio de la empresa…”
“…El proyecto no se realizará en terrenos forestales o preferentemente forestales. Así mismo con la construcción del presente proyecto no se afectarán individuos de manglar…”
“…con un sistema natural que en conjunto contiene áreas de importancia por lo que se requiere se realicen todas las acciones necesarias para evitar daños al ambiente en particular a la vegetación de manglar, por lo cual si no se realiza la remoción de manglar el proyecto puede ser autorizado…”.
De lo anterior nuevamente se indica que se ha comprobado la remoción y eliminación de mangle por el desarrollo de dicho proyecto, por lo cual los órganos de gobierno pueden objetar e inclusive detener las obras hasta ahora realizadas por la promovente en el sitio del proyecto debido al incumplimiento de la propia resolución emitida por la Semarnat, concluye el dictamen.