Ante amenaza de desaladora, ciudadanos exigen: Dejen vivir a la Lagunita del Ciprés
La gente pide la publicación del decreto para proteger a la playa al sur de Ensenada (Foto: cortesía bionero.org).
MEXICALI
Activistas y ciudadanos de Ensenada se presentaron ante las oficinas del gobernador de Baja California, Francisco Vega, para pedirle que sea publicado el decreto para el área natural protegida de la Lagunita del Ciprés, en la costa de Ensenada.
El lugar es un cuerpo de agua dulce ubicado en las inmediaciones del Infonavit Punta Banda y la playa de El Ciprés al sur de la ciudad de Ensenada, en torno al cual cientos de bajacalifornianos se han unido para exigir su conservación.
Siendo la última de las lagunas costeras que queda en la Bahía de Ensenada, la lagunita está amenazada por el proyecto del alcalde ensenadense Enrique Pelayo que pretende imponer una planta desaladora de agua.
Con el argumento de que eso implicaría la desecación de la laguna y la modificación permanente del hábitat y refugio de miles de aves migratorias, miembros de dos asociaciones, Haciendo lo Necesario, y Arte y Medio Ambiente en Armonía, convocaron a un performance y expo fotográfica en el patio central del edificio del Poder Ejecutivo en Mexicali.
El espectáculo "Lagunita del Ciprés, déjenla vivir", presentado el día 30 de enero pasado, fue atendido por José Luis García Chavira, representante de la Secretaria de Protección al Medio Ambiente, quien se comprometió a dar seguimiento a la propuesta de declaratoria de la lagunita como parque natural protegido.
La ambientalista Rita Beadle Luna dijo que buscarán acercarse también al Congreso del Estado, para que haga un exhorto al gobernador a fin de acelerar la protección del sitio.
La historia y gestión ciudadana
En el diario de la expedición de Juan Rodríguez Cabrillo (1542), se describen las grandes lagunas de agua dulce que tenía la Ensenada de Todos los Santos como fuente de vida para una gran ciudad. Debido al crecimiento poblacional se han mermado estas grandes lagunas, socavando una fuente de agua natural.
Hoy en día, la Lagunita del Ciprés es el único humedal que subsiste ante los intensos y frecuentes impactos que amenazan con desaparecerla.
Por ser un cuerpo de agua cercano al mar, se forma en ella un sistema singular que abarca cuenca, laguna, dunas, playa y mar. El conjunto constituye una de las zonas naturales de mayor valor para la conservación en la ciudad.
Es un atractivo que es aprovechado como área recreativa por la población desde hace muchos años.
Más aún, el sistema ofrece servicios ambientales, como defensa de la ciudad ante inundaciones en las tormentas de invierno, captación del agua de lluvia de importancia para la biodiversidad debido a que es un sitio de anidación, así como un lugar de descanso y alimentación de aves locales y migratorias.
Debido a su alto valor, el Programa de Desarrollo Urbano del Centro de Población de Ensenada tipifica esta zona como de conservación.
Desde 2011, se han hecho gestiones ciudadanas ante el Ejecutivo Federal para decretar el área natural protegida de la lagunita.
En junio de 2013, se entregaron al director general de la Comisión Nacional de Agua (Conagua), David Korenfeld Federman, 4 mil firmas de ciudadanos de Ensenada para obtener la declaratoria. De igual manera, se hizo llegar copia de este escrito al Presidente Enrique Peña Nieto, al entonces gobernador del estado, José G. Osuna Millán, y al anterior presidente municipal de Ensenada, Enrique Pelayo Torres.
Con apoyo de la sociedad civil, la secretaria de Protección al Ambiente publicó el 15 de marzo de 2013 en la Página 9 del Periódico Oficial del Estado de Baja California, el inicio del procedimiento de declaratoria de la Lagunita del Ciprés como Parque Natural Protegido.